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Radiaciones propias de la Tierra

Existen radiaciones electromagnéticas que provienen de forma natural de la propia Tierra. Pueden afectar o no a su salud dependiendo del tiempo que se pase en determinados sitios mientras se trabaja o se descansa. Llegado el caso, se pueden contraer enfermedades de cierta gravedad.

Las llamadas “líneas de Hartmann” son líneas que aparecen de forma natural y que registran magnetismo de Norte a Sur (con distancias de 2 m) y de Este a Oeste (con distancias de 2,5 m). Se manifiestan en el terreno de forma de vallas invisibles de aproximadamente 20 cm. de grosor y penetran los edificios y se vinculan en red sobre la corteza terrestre. Las intersecciones de estas líneas son los sitios que pueden causar problemas para el organismo humano. 

Las llamadas “líneas de Curry” tienen similitud con las anteriores pero se manifiestan de forma diagonal a los polos y están separadas por unos 3 m., formando otras redes que rodean la tierra de forma diagonal. Las intersecciones de estas líneas también pueden causar problemas de salud en la población que permanece cierto tiempo sobre ellas.

Existen también otras fuentes de radiación electromagnética proveniente de la Tierra, denominadas en algunos casos, “radiaciones terrestres”. Las corrientes de agua subterráneas emiten barreras de microondas verticales, tal como lo hacen las fallas geológicas. Los depósitos de petróleo, gas y minerales pueden también ser causa de iguales radiaciones. Son las intersecciones de tales vallas las que pueden causar los problemas mencionados..

Si en algún punto se cruzaran varias de estas líneas o una combinación de varias, se podría considerar que ésta sería un fuente patologías severas.

La Geobiología es la ciencia que estudia las consecuencias de estas radiaciones. El médico alemán Dr. Ernst Hartmann realizó estudios pioneros poco después de la segunda guerra mundial.  Existen en la actualidad muchas investigaciones en este campo que reúnen ya miles de casos historiados.

La conclusión de todos estos estudios es que existen muchos casos de enfermedades graves que hasta ahora no se atribuían a una exposición prologada sobre las zonas de emisiones patogénicas.

Se incluyen en estos casos a niños que contraen frecuentes enfermedades, tienen resultados escolares insuficientes o crecimiento lento o que se enferman gravemente.

Se pueden atribuir a estas exposiciones algunos casos de problemas cardíacos, cáncer, tumores, inmunodeficiencias, reumatismo y también problemas matrimoniales.

Muchos de estos problemas podrían evitarse con solo mover de lugar la cama a otro sitio. Es una solución simple a algunos problemas de salud.